La “Mini Escultura” es una obra de arte personalizada que captura la esencia de un momento único en la vida de un niño. Esta escultura meticulosamente detallada presenta un molde de yeso pintado en un tono plateado metálico, que reproduce con fidelidad la pequeña mano del niño, resaltando cada pliegue y curva con un realismo conmovedor. La base de la escultura, en un suave contraste de color blanco, lleva el nombre del niño en una caligrafía elegante y fluida, añadiendo un toque personal y exclusivo.
Esta mini escultura está decorada sutilmente con adornos delicados, como una mariposa y una pequeña flor, que añaden un encanto juguetón y una dosis de color a la presentación. Diseñada para ser un objeto de decoración exquisito o un regalo único, esta mini escultura es una forma encantadora de conmemorar la infancia y mantener vivo un recuerdo palpable a lo largo de los años. Su tamaño compacto la hace perfecta para exhibir en estanterías, escritorios o como una pieza central en cualquier espacio, ofreciendo un homenaje diario a esos momentos irrepetibles de crecimiento y descubrimiento.
